La nave principal es muy antigua, la primera en construirse en la zona hace ya varias décadas. Tiene goteras en numerosas partes del tejado a pesar de los pequeños arreglos que fuimos haciendo, los muros interiores se cayeron por su mal estado y las paredes exteriores se deshacen al roce con las manos debido al desgaste del agua de lluvia que se resbala por ellas. Cuando llueve mucho las camas de los animales se mojan, el estado de la estructura ponen en peligro a vida de los animales a medio plazo.
Cambiar el tejado y reformar las paredes supone una inversión de miles de euros y nos quedan menos de 2 años de contrato de alquiler.

El voladero de las palomas lo construímos de manera apresurada pues al poco tiempo de mudarnos nos surgió un rescate de más de 50 palomas que estaban en condiciones pésimas, rodeadas de heces y de cadáveres. Para poder hacerle frente construimos el voladero con los pocos recursos que teníamos: maderas recicladas, malla de gallinero,... Hoy, tres años después, el deterioro es notable y los pequeños arreglos que tenemos que hacer para que siga en pie son casi diarios, poniendo en peligro a vida de las palomas, especialmente de las tullidas que son las más vulnerables. En cualquier momento puede caer la instalación o dejar espacio para que entre algún predador.

La caseta de les pates, gaviotas, ocas y gallos es de segunda mano, cuando nos la donaron sufrió mucho al desmontarla y volver a montarla. En los inviernos anteriores ya le voló el tejado en dos ocasiones teniendo que volver a reconstruirlo, pero ahora es la estructura al completo la que amenaza con derribarse y tenemos miedo de que pueda acabar provocando un accidente, además de que las aves se queden sin hogar donde refugiarse.

ACTUALIZACIÓN:
Finalmente el tejado de la caseta de les pates salió volando entero un día de temporal.
Afortunadamente nadie salió herido pero mientras no conseguimos la forma de arreglarla tendrán que vivir en una cuadra que habilitamos para elles.

El recinto de las ovejas está muy deteriorado, los muros interiores que dividían el espacio en 4 se derribaron y lo que es peor, una parte del suelo se hundió dejando un agujero que va a dar la una caída de 1.20 M al lugar donde se acumulaba el purín. Hemos cubierto ese agujero con comederos de cemento pero cada vez es más grande y tenemos miedo de que una oveja se cuele y caiga por él. En una ocasión ya se coló una de las gatas del santuario (Troska) que quedó atrapada y tuvimos que romper parte de la pared para poder acceder a ella y rescatarla.