LOLA

cabras
Su madre y su hermano murieron
Fue criada a biberón
Le costó un poco adaptarse al resto de animales
Ahora es muy feliz en el santuario

LA HISTORIA DE LOLA

Lola es una cabra muy sociable que llegó a Vacaloura siendo un bebé.

Nació en un patio de una casa particular. Su madre fuera explotada y ahora vivía completamente desatendida allí. Una vecina veía a la madre de Lola sufrir mucho, con un gran embarazo y una ubre que le llegaba al suelo, debido a una terrible mastitis.

El día del parto llegó, y nació Lola y un hermano. La mamá no podía levantarse, las autoridades no actuaban, y Lola y su hermano intentaban mamar de la ubre enferma de su madre, pero el pus a penas dejaba salir leche.

El hermano de Lola no lo resistió más y falleció. No podíamos, ni nosotres ni la vecina que lo observaba todo, permitir que pasara lo mismo con Lola.

Su mamá estaba agonizando y Lola no entendía por qué se estaba quedando sola y por qué tenía tanta hambre. No llegamos a tiempo para salvar a su madre, pero no íbamos a permitir que su pequeña muriera de frío y hambre.

Así que esta vecina la rescató y la trajo de madrugada a Vacaloura, llena de pulgas y de miedos.

La criamos a biberón y vivió con nosotres en la misma habitación, celándose del ordenador al que se subía directamente cada vez que nos veía trabajar, haciendo parkour por las paredes y pises encima de cualquier superficie blandita (cama, ropa,... 🤦🏻‍♀️).

Mario y yo la criamos como una hija y nos costó mucho que se acostumbrara a vivir feliz con el resto de cabras, aunque ahora está encantada.

Le gusta seguir a la gente cuando vienen de visita y escuchar muy atenta las historias de todos los habitantes del santuario, incluída la suya.

Así recuerda la suerte que tuvo de venir a parar a Vacaloura.